Modelo pedagógico desarrollista
Estos modelos han
sido definidos como la herramienta que se utiliza para facilitar el acceso al
conocimiento, o la representación de las relaciones que predominan en el acto
de enseñar.
Es también un
paradigma que busca coexistir con otros y que sirve para organizar la búsqueda
de nuevos conocimientos en el campo de la pedagogía.
Los
modelos pedagógicos, nos proporcionan el sentido de las prácticas, de los
métodos de los profesores, de los estudiantes o alumnos y de la relación que
los une y les da coherencia.
Los modelos dan un sentido a las diferentes
posibilidades de situaciones de enseñanza y aprendizaje coherentes. Los modelos
hacen parte tanto del estado de una sociedad, de una cultura y de su escuela,
así como de las representaciones que le están asociadas”[1].
De allí, que la escuela como
lugar de prácticas pedagógicas, posea formas propias de pensamiento,
concepciones propias sobre su quehacer educativo, metodologías propias de
enseñanza y aprendizaje, que poco a poco, van dando coherencia y cohesión entre
la identidad de la persona, los saberes, la cultura y la sociedad. Por ello,
los modelos pedagógicos buscan ser los principios conductores de la actividad
educativa.
De allí se deduce que, todo
modelo pedagógico, independientemente de su contenido, necesita contar con unos
presupuestos teóricos y metodológicos como:
·
Las concepciones o teorías filosóficas y sociológicas que les
sirven de base general.
·
Las teorías psicológicas que les sirven para abordar el papel
y funciones de los componentes personales en el proceso de enseñanza -
aprendizaje.
·
Las teorías pedagógicas que les permiten estructurar las
relaciones objetivos - contenidos - métodos - medios y evaluación de la
enseñanza y el aprendizaje.
EL MODELO DESARROLLISTA
EL MODELO DESARROLLISTA
Los máximos exponentes de este
modelo son Dewey y Piaget. Este modelo, “procura intervenir al alumno en sus
conceptos previos, influyéndolos y modificándolos a través de sus experiencia
en la escuela, mediante experiencias confrontadoras y prácticas
contextualizadas. En este plano el estudiante construye sus conocimientos,
asimila e interioriza los conceptos y reorganiza sus conceptos previos
partiendo de las experiencias de éstos con la vida o con las ciencias”[1].
El modelo
desarrollista se propone entonces para una sociedad industrial, técnica y
científica, localizada en un régimen abierto, donde el medio fundamental es la
comunicación y el conocimiento.
Las principales características de
este modelo pedagógico son las siguientes:
- “Los procesos educativos, consisten en
formar, a través de la exploración de la cultura como producto del
desarrollo científico, hombres y mujeres inteligentes.
- Los procesos instructivos en el modelo
pedagógico, consisten en que los alumnos no solo aprendan los contenidos
de la lógica de las ciencias en tanto teorías, leyes y conceptos sino el
método con que estas ciencias se han construido.
- El modelo pretende potenciar el
pensamiento de los estudiantes en tanto evolucionan sus estructuras
cognitivas para acceder a conocimientos cada vez más elaborados. Los
alumnos son personas que pueden descubrir el conocimiento y construir sus
propios procesos de aprendizajes. El conocimiento se construye a través de
las experiencias vividas y de la expresión de dichas experiencias.
- El currículo es el conjunto de
responsabilidades de la Institución para promover una serie de
experiencias y prácticas en las que se posibilita que el alumno/a pueda desarrollar
su pensamiento.
- La
intervención pedagógica del maestro se caracteriza por incidir en la
actividad mental y constructiva del estudiante, creando las condiciones
favorables para que los esquemas del conocimiento (con sus significados
asociados) se reconstruyan, y los conceptos o las representaciones de
categorías no sólo sean identificadas, sino que se puedan generalizar,
transferir y e implementar para formular y resolver problemas; facilitando
al estudiante el "aprender a aprender", es decir,
"autorregular" sus aprendizajes, acorde a sus diferencias
cognitivas, sus estilos o hábitos de procesamiento de información, sus
redes conceptuales, sus estrategias de aprendizaje, sus competencias y su
inteligencia.
Lo anterior significa para el maestro "el
respeto por los demás, la aceptación de sus ritmos y limitaciones, el
reconocimiento de las diferencias, la tolerancia en la crisis, la solidaridad
permanente y la lealtad en el compromiso…
la base esencial en la puesta en marcha de una cultura escolar que favorezca
la formación de la singularidad en contextos colectivos, potencializados como
espacios democráticos, justos y libertarios"[2].
El maestro desde la
enseñanza recíproca, las interacciones sociales compartidas, la realimentación
cotidiana, la interlocución con los aprendices, genera el andamiaje educativo
cultural, los apoyos, las mediaciones, las herramientas, los signos, los mundos
posibles del lenguaje, los intereses, las motivaciones, las curiosidades y la
afectividad pertinente; para alcanzar los propósitos establecidos con relación
al conocimiento, el cual se constituye en el escenario fundamental para crear
nuevas situaciones, profundizar conceptos y transformar en correspondencia con
la realidad.
·
El alumno debe aprender a pensar
y aprender haciendo. El estudiante debe estar preparado para buscar la
información, una vez hallada reconocerla, problematizarla, reconstruirla,
deconstruirla, comprendiendo el qué quiere decir, para qué sirve, cómo
aplicarla, qué relación tiene con lo que cada uno es como sujeto y como
sociedad, cultura, historia; en proyectos pedagógicos que respondan a lo
abierto, local, global, público, institucional, situacional,
interdisciplinario, pluricultural, diverso, complejo, cívico y lo informático.
·
La metodología está basada en pedagogías
activas: el alumno aprende haciendo, realizando actividades desde sus propios
intereses, a través de experiencias directas con los objetos a conocer y en
situaciones concretas, debe tener la posibilidad de comprobar sus ideas por
medio de sus aplicaciones, descubriendo por sí mismo su validez. La
metodología a seguir es entonces, la hermenéutica, por involucrar entre otras la
dialéctica de la crítica, el análisis, la interpretación y la reiteración.
- Priman los procesos de aprendizaje sobre
los procesos de enseñanza. El alumno es el centro del proceso
docente-educativo.
- Los medios que se utilizan son mapas
mentales y mapas conceptuales.
- La escuela debe enfatizar
en la autonomía como finalidad educativa: pensar por sí mismo con sentido crítico,
ponerse en el lugar del otro, considerando sus puntos de vista y ser
consecuente, alcanzar una triple autonomía intelectual, social y moral;
posibilitando la responsabilidad personal, la toma de posición ética
frente a los valores, los deberes y derechos universales, la participación
democrática como ciudadano, la formación y potenciación de capacidades,
destrezas y competencias.
- La Evaluación se desarrolla por
procesos: el profesor observa y analiza para comprobar, constatar,
comparar, determinar, identificar, diferenciar, valorar, presentar
alternativas y tomar decisiones”[3].
En el modelo desarrollista, el maestro crea un ambiente estimulante, que facilite al niño su acceso a las estructuras cognoscitivas, la meta de este modelo, es lograr que el niño acceda progresiva y secuencialmente a la etapa superior del desarrollo intelectual de acuerdo a las necesidades de cada uno. El niño construirá sus propios contenidos de aprendizaje. El maestro será un facilitador de experiencias.
METAS: Acceso a una etapa de mayor complejidad
Pero considerando las características bio -
psico sociales individuales, ritmos de apren
dizaje.
RELACION: Maestro estudiante bidimensional
donde el maestro se convierte en facilitador
del proceso.
METODO: Consiste en crear ambientes propicios para la realización de los métodos pero teniendo en cuenta las características individuales del estudiante.
CONTENIDOS: Se da una adecuación curricular.
DESARROLLO: Progresivo, secuencial, individual, trabaja por procesos.
